La intérprete publica un vídeo cantando en público por primera vez en 13 años. Lo hace entre acusaciones a su familia y críticas a su hermana por haber interpretado sus éxitos en los Radio Disney Music Awards de 2017
Britney Spears vuelve a cantar. La intérprete, de 40 años, compartió el sábado un par de vídeos en su Instagram. En ellos se la puede ver en la penumbra de su casa, cantando a capella el que fuera su primer gran éxito, Baby One More Time. “Esta soy yo ayer haciendo la colada y separando la ropa”, explica la cantante en su publicación, trufando su discurso de emoticonos. “Hace muchísimo tiempo que no comparto mi voz… quizás demasiado. Y aquí estoy jugando en mi casa con una versión diferente de Baby”.
Es la primera vez que Spears canta en público desde que fuera liberada de su tutela, una situación que la ha sometido al férreo control de su padre durante 13 años. James Parnell Spears, de 70 años, administraba la fortuna de su hija, limitaba sus apariciones en público e incluso decidía sobre su vida personal, impidiendo a la cantante casarse o tener un hijo. La tutela terminó, después de un mediático juicio y tras la renuncia de Spears padre, en septiembre de 2021.
La cantante hace referencia a esta situación en el post de Instagram, y explica que ha querido volver a grabar su primer éxito durante años, decisión que fue bloqueada por el equipo que administraba su tutela. “¡Pues yo he pedido lo que quería desde hace 14 años … una versión diferente de Baby, pero que los productores se lo curren de verdad y lo monten, pero el equipo dijo que no”, explica Spears. “Y lo que me ofrecieron fue una versión de cuatro chicas, mi hermana incluida, haciendo una remezcla de cinco minutos de cuatro canciones”.
Este comentario puede ser una referencia a cuando su hermana, Jamie Lynn Spears, cantó una remezcla de varios de sus éxitos en los Radio Disney Music Awards de 2017, un gesto que la cantante ya recriminó a su hermana en el pasado. En la actuación de hace cinco años se puede ver a Spears, que estaba entre el público, aplaudir ante el tributo con sonrisa forzada.
Britney Spears está enfrentada desde hace meses con su hermana pequeña, en una guerra abierta que se libra, sobre todo en las redes sociales. El enfrentamiento surgió a raíz de unas declaraciones de Jamie Lynn en las que justificaba su actitud pasiva frente a la tutela judicial de su hermana y el calvario personal que ha sufrido en los últimos años. A principios de enero Britney comentó que no le gustaba que su hermana —que ha hecho algunos trabajos como cantante pero que principalmente desarrolla su trabajo como actriz— cantara sus canciones. “Mi supuesto sistema de apoyo me ha herido profundamente”, llegó a decir.
Ahora esta nueva publicación viene a añadir más madera al enfrentamiento. En ella, Spears acusa a su familia de quitarle sus derechos, y de “arruinar su condición de mujer”. A pesar de haberse librado de la tutela paterna, el litigio que la enfrenta a su progenitor aún no ha terminado. Los letrados de la cantante acusan a su padre de haberse quedado con 6,3 millones de dólares de su fortuna, y también de “pagar a sus socios decenas de millones más” a lo largo de una tutela que califican de “corrupta y conflictiva”.
Desde que recuperara el control de su vida, Spears se ha mostrado abierta y ha compartido en sus redes sociales parte de su vida privada. Allí anunció, el pasado abril, su embarazo, y su posterior aborto. También utilizó Instagram para anunciar su boda y publicar después instantáneas del enlace, que la unía con el iraní Sam Asghari, de 28 años. Por el momento todas estas novedades están más relacionadas con su vida personal que con la profesional, pero en este nuevo post Spears deja claro que quiere volver a cantar. Y que tiene voz para ello.
CRÉDITOS: REDACCIÓN EL PAÍS