El cantante aseguró que nunca se alejará de la música, pero es muy probable que no vuelva a lanzar discos.
Enrique Iglesias anunció este viernes que el 17 de septiembre lanzará un nuevo disco llamado «Final», el undécimo y «último» de su carrera: «Tendrá volumen 1 y volumen 2, pero es el último. Estoy en ese momento de mi vida, ese capítulo de mi vida, que creo que es el tiempo adecuado de parar».
El cantante español dio la noticia en una charla retransmitida por internet donde estuvo acompañado por el puertorriqueño Ricky Martin y el colombiano Sebastián Yatra, con quienes comienza a finales de mes una gira norteamericana, y que se mostraron sorprendidos cuando lo escucharon.
«El título ‘final’ tiene mucho significado. Intento deciros que podría ser mi último álbum (…) No es algo que haya pensado los últimos meses, sino los últimos años», explicó Iglesias.
«Nunca voy a parar de hacer música y escribir canciones, me encanta, pero voy a hacerlo de otra forma, no necesariamente empaquetado como un álbum».
Enrique Iglesias, de la sombra de su padre a la forja de un nombre propio.
Famoso desde la cuna, como hijo del también cantante Julio Iglesias y de la «celebrity» Isabel Preysler, Enrique Iglesias (nacido en 1975) ya sorprendió a todos en su día cuando, sin haber dado nunca muestras externas de inclinaciones artísticas, anunció su intención de seguir los pasos de su archiconocido padre.
Con más de 80 álbumes en 14 idiomas y unas ventas superiores a los 350 millones de ejemplares, la sombra de su progenitor era demasiado larga y muchos se preguntaban si no aplastaría al vástago cuando en 1995 publicó su primer álbum, el homónimo «Enrique Iglesias».
Era un trabajo que incluía canciones de su puño y letra y en el que predominaban las baladas de pop rock edulcoradas, aptas para el gusto adolescente, de entre las que alcanzó especial notoriedad «Experiencia religiosa», además de «Por amarte».
No solo triunfó entre el público adolescente, que encontró en el joven y apolíneo Iglesias un nuevo referente de sus tonadas sentimentales, con más de 5 millones de copias vendidas en todo el mundo, sino que también lo hizo en las galas de premios, haciéndose por ejemplo con el Grammy al «mejor álbum de pop latino».
Pronto quedó claro que este artista español criado en Miami desde los 13 años conectaba con los oyentes del otro lado del Atlántico y empezó a igualar los registros de otras grandes figuras del orbe latinoamericano, como Selena o Jon Secada.
Con su éxito le arrebató la posición reina de la lista Top Latin Albums de EU a su propio padre, que ese mismo año se resarció imponiéndose a su hijo en los American Music Awards, asentando la leyenda de la supuesta rivalidad entre ambos.
Iglesias se convirtió junto a Shakira, Jennifer López, Ricky Martin o Shakira en uno de los primeros protagonistas de lo que se dio en llamar el primer «crossover», es decir, el desembarco de estrellas del mundo latino en el panteón musical norteamericano para alcanzar los confines del mundo, muchos años antes del auge del reguetón.
CRÉDITOS: REDACCIÓN POR EL UNIVERSAL.