El nombramiento de Bad Bunny como artista principal del show de medio tiempo del Super Bowl 2026 ha desatado una intensa polémica en redes sociales. A pocos días del anuncio, más de 100 mil personas han firmado una petición en línea para que la NFL lo sustituya por otro intérprete.
La solicitud, publicada en la plataforma Change.org, argumenta que el reguetonero puertorriqueño no representa el espíritu “tradicional y familiar” del evento deportivo más visto en Estados Unidos. Quienes impulsan la campaña aseguran que su música y estilo no son apropiados para el espectáculo, e incluso proponen como reemplazo al cantante de country George Strait, ícono del género estadounidense.
La controversia ha dividido opiniones entre los fanáticos: mientras algunos apoyan la idea de un cambio, otros defienden la elección de Bad Bunny como un paso histórico hacia una mayor representación latina en el escenario del Super Bowl.
Hasta el momento, ni la NFL ni el propio artista han emitido declaraciones sobre la petición. Sin embargo, la conversación continúa creciendo en redes, donde el debate sobre diversidad cultural y la influencia de la música urbana vuelve a encenderse.
