El Gobierno de México puso en marcha 140 módulos piloto en los 32 estados de la República para iniciar el trámite de la nueva CURP biométrica, un documento que busca reforzar la seguridad en la identificación oficial de los ciudadanos.
A diferencia de la clave alfanumérica tradicional, la CURP biométrica incluirá huellas dactilares, escaneo del iris, fotografía del solicitante, firma electrónica y un código QR con datos encriptados, lo que permitirá verificar la identidad de manera más rápida y confiable.
El periodo de prueba se extenderá hasta el 16 de octubre de 2025, fecha en que el nuevo sistema entrará en operación oficial. Durante esta etapa, los ciudadanos podrán adelantar su trámite sin que sea obligatorio.
En la Ciudad de México se instaló un módulo piloto, mientras que en el Estado de México se habilitaron cuatro. El resto están distribuidos en oficinas del RENAPO y Registros Civiles locales.
Aunque por ahora el trámite no es forzoso, se prevé que gradualmente este formato sustituya al actual para trámites oficiales en áreas como salud, programas sociales, migración y búsqueda de personas.
La medida representa un paso hacia la modernización administrativa del país, con la expectativa de que en el futuro la CURP biométrica se convierta en un requisito indispensable en la vida cotidiana de los mexicanos.